Lluvia y carrito.

Por aquí llueve poco, pero cuando me compré el carro tenía yo esa cosilla de qué haría cuando lloviera y tuviera que llevar a pometa al cole. Vi un sujeta paraguas que ponia que servia para
un noventa y tantos por cien de los carritos, así que yo lo compré. Imagiraros para qué carrito no servía, pues para el mio, si si, la ley de "murfi" (o como se escriba). El sujeta carritos era el siguiente:

En fin, que cuando llueve me apaño como puedo pero hasta yo me río de mí misma cuando salimos los 3, osea pometa, yo y el paraguas. Lo curioso es que justamente ese día en el paso de cebra hay coches aparcados y cuando no los hay no paran los coches que circulan para dejarnos pasar. Y los charcos, esa es otra, voy por la acera y justamente hay una moto encima, casualidad (o la famosa ley de "murfi") que justo al lado cuando bajas de esa acera hay un charco! Ale marcha atras y a bajar antes de ella. Y a todo eso hay que hacer malabares con el paraguas, que con un poco de suerte no hace aire que esa es otra!
¡¡Vivan los protectores de lluvia!! (y el sujeta paraguas si me hubiera servido, claro)